Whole Kitchen en su propuesta dulce para el mes de Julio nos invita a preparar:
El Baked Alaska, también conocido como Tortilla Sorpresa o Tortilla Noruega, es un postre formado por helado con una base de bizcocho que se cubre de merengue y se hornea.
Y yo me preguntaba:¿como voy a hornear un helado?, pues parece ser que la clave está en que la clara de huevo es muy mala conductora del calor, lo que unido al corto tiempo necesario para dorar el merengue, hace que el calor no llegue al helado y este no se derrita.
Existen muchas dudas sobre el origen real de este postre. Hay versiones que indican que se originó en China, otros opinan que fue en Estados Unidos y otros que fue Francia.
La versión estadounidense situa el origen de esta delicia en un helado envuelto en una masa caliente que se sirvió en un banquete en la Casa Blanca durante la presidencia de Thomas Jefferson, en 1802.
Por otro lado, se dice que fué el físico Benjamin Thompson Rumford quien, en su interés por demostrar la resistencia al calor de las claras de huevo batidas,creó un postre muy similar al baked alaska que denominó "Tortilla Sorpresa".
Los franceses, por su parte, aseguran que fue Balzac quien lo introdujo en el páis gracias a un chef chino que le enseñó a preparar un helado envuelto en hojaldre crujiente que poco a poco fué derivando en la envoltura de merengue.
En 1895 el Chef del Hotel París de Montecarlo, bautizó al Baked Alaska como Omelette a la norvegienne, lo que hizo que este postre se hiciera popular en Europa.
Para esta versión yo me he decantado por una base de brownie y un helado de frutos rojos y he decidido presentarlo en vasos individuales porque me páreció que sería mas sencillo de montar y de conseguir un resultado aceptable, además, en casa somos sólo dos y tengo que intentar hacer versiones chiquititas de estos dulces porque si no nos vamos a poner tremendos..
Para esta versión yo me he decantado por una base de brownie y un helado de frutos rojos y he decidido presentarlo en vasos individuales porque me páreció que sería mas sencillo de montar y de conseguir un resultado aceptable, además, en casa somos sólo dos y tengo que intentar hacer versiones chiquititas de estos dulces porque si no nos vamos a poner tremendos..
NOTAS:
Tanto la base, cómo el sabor del helado son totalmente personalizables, podéis usar los que mas os gusten.
La mermelada es opcional y podéis sustituirla por chocolate,puré de frutas, o lo que se os ocurra.
Es muy importante que cubráis bien el helado con el merengue, el calor no debe llegar nunca al helado.
Por lo mismo, también es importante no pasarse con el tiemo de horneado, simplemente esperar que se doré el merengue y retirar, es cuestión de minutos.
Para comprobar que el almíbar está en el punto justo retiramos el cazo del fuego, cogemos una cucharadita de almíbar y la dejamos enfriar uno segundos, al tomar el almíbar entre los dedos índice y pulgar debe poder formar una bola.
A la hora de montar los vasitos hay que trabajar con rapidez, así que es mejor que intentemos tener todo a mano para evitar que al helado le de tiempo a derretirse demasiado.